jueves, 31 de enero de 2008

Por la ruta como por el mar

Eunápolis, Bahia, Brasil.
Agosto de 2007.

En este jeito de viajar de moto como navegar, de cruzar el Brasil como quem cruza el Atlántico, el paisajem muda como muda el mar. Y los morros son las ondas, los riachos, los bosques, la mata, el eucaliptus, los ranchos, los urubús, y esa marejada as veces e plana y outras, me façe viajar sumerjido!

Salí de Santo Antonio al medio día...
Pegué lluva el tempo todo y me sorprendí, parando en los pontos de omnibus para deixar ela pasar.
Y me volté a sorprender, sem angustia nem agonía, relaxando y gozando como dice la companhera ministra.

La estrada está boa ate perto de Itabuna... asim mesmo, segui de noite porque en el hotel Flecha, la noite costa 45 para solteiro, y eu habia pagado 25 en Sto Antonio en la pousada más linda que me lembro, que es muito, con piscina, internet, tela plana y todo, todo con detalhes de ensonho, por eso se llama pousada dos sonhos!!

Ache una pousada de 20 en Jequitiba. Ate lá no habia feito mais de 200, la alegria so era el consumo: 16 por litro. Descansé, janté y pasé por la lan house.. De volta, un vinho, que foi dos... Alguém que me falo de Diego y del Che Guevara, eran tres da manha cuando de Chico Mendes ya habíamos pasado por el Comandante Prestes, Zumbi dos Palmares y Paulo Freire! Y la donha del boteco nos mando para la rua, cuando estabamos todos convencidos de que alguem quiso y se benefició con que argentinos y brasileros, ficasemos tanto tempo sen comprendernos siquiera na fala. Y so na burrice de quem e melhor.. que vamos deixando la copa fifa para los canarios porque la libertadores e azul y oro!!

El domingo por fin iba a acumular kilómetros.
Me sorprendí otra vez.. que cosa esto de acordar na maresía y salir na estrada.
Antes, cuando alguem ultrapasaba na contramao, eu ficaba firme, llegue a buscar una pedra para punir al agresor, estrelhando ela contra el parabrisas. Agora, será esto de la velhice doida, disminuo, procuro ate el encostamento, y observo con tristeza el perigo que corre quem esta tam apurado.
Porque cuando puedo, eu exprimo los 157 hp de mis cuatro cilindros.
Sento cada golpe de pistón, sento como xeran los carburadores, como sopla la descarga, sento el caucho que fica no asfalto y la corrente esticada por la pontecia!!
Y en minha postura deportiva me deito encima del deposito, y abrazo minha gostosa de mil cen latidos por minuto, que como una boa hembra, vem pelada y ciando!!

Pare en Eunapolis a abastecer y façer un lanche.. y se me apareció el Calixto, no el de Sabina, el de Brazil Riders. Nao tevemos muito tempo de bater papo, mais eu le dije, como decia Vito Dumas: No dejes que la mano de tu amigo se caliente en tu mano.
Asi que otra vez a comer agua, y de sobremesa una quente, y dormir voando, como cuando el ronco me faz so pensar que eu ya sabia, que lo mas lindo que existe en la vida, es viajar de motocileta.

Segunda (lunes) al fin, salí cedo.
Vou a escribir un romance en portunhol.
Va a ser en dos versiones, una cada para divisa, ate que nos acostumemos. Como cuando leíamos la naranja mecánica.
La gostosa pegó no tombo. Nao quería deixar la bahia... El consumo seguia en 16 por litro. Y la pista, foi legal ate 70 km antes de Texeira de Freitas y de ahi en adelante, una buraquera danada.
Paré en una lanchonete, antes del río, solo para beber mina ultima gelada bahiana, nao se por cuanto tempo.. o nao sabía, porque nao sabia que precisaba deixar la bahia para comenzar a ter falta de ela.
Espíritu Santo. La pista mejora, mais... e perigosa. Porque nao tem padrón. Nao son los buracos, son unos surcos, como trillas.. que deixan las carretas cargadas de pedra. De noite, na vera dos doscentos.. eso debe ser mortal. Sin embargo, como era día, subí de tres mil rpm a tres mil quinientas y a veces cuatro.
No es por precaucion. Tenho que cuidar la gasolina, el pneu... El consumo melhoro mas, 18. Se fizo noite cuando estaba a 50 km de Vitoria.
Todo caro. Una schin refresco que en bahia costa um aqui costa dos. Y el hotel, sem banheiro.. me quería cobrar 40. Deixe pasar la hora de volta a casa y retomé a medianoite.
Y llegué hasta Guaraparí, consumo? llegué a 21! y el hotel, con banhero, 15. El café doble, el minino del balcón no me quiso cobrar..

Terça. (Martes)
A las sete estaba pegando no tombo, outra vez. Me empurró un paraibano de Pombao, el Cicero. De esos que andan vendiendo redes por el mundo. No solo nao acepto un agrado, sino que me deu una fita isolante para resolver una perdida na manguera del radiador. Me ofrecio 50, por la carona hasta Rio, mas nao tenho capacete.

Ontem, me paro la policia rodoviaria.. minha cartera esta vencida.. mesmo me deixaron voltar a casa para renovarla!!

Cuando Victor Ramos me mandó una fuerza para la gasolina y me dijo: volte logo, vc faz falta.. esta e sua casa... sentí que meu viagem era una realidad.

Crucé la divisa de ES para RJ, e sentí que ya estaba en casa. Tanto, que nao vo parar en Rio.. hoje sigo direito a SP!
Vento del sur en la cara y la mil cien, en cuatro mil rpm. Tirando la rodilla para fora en las curvas... con el ronroneo acompasado.

Como cuando iba a concertar meus veleros, y en vez de trabalhar, dormia el dia todo.. para deixar que las duas almas se misturasen. Como cuando salia para alto mar, y solo depois de dos o tres dias.. me sentia el donho del mundo.

Hoje, minha energia ya faz parte da gostosa. Hoje, meu horizonte e la fita de asfalto.

Pe na estrada...

Itaparica, Santo Antonio de Jesus.
Agosto de 2007.


En este viaje de moto encarado como si fuese un crucero a vela, estas experiencias se hacen presentes a cada momento. Tal vez por aquello de que el canto del viento, es el mismo. El dinero de la caja no alcanzaba para llegar ni a Porto Seguro, cuando, gracias a que la decisión de partir ya estaba tomada, apareció un mail con la novedad de que habían vendido unas velas en Dakar y me enviaban una punta por Western Union!

Pasé por el Pelourinho, bebi unos chopps com Michel, lê agradeci la cuerda de remolque que me dió el día que cortó mi crédito. Ese día comencé a caer en la real.

Apronté en la boca de la Rosinha... y dormí, borracho y loco como todos los días, esperando el primer ferry para cruzar a Itaparica y comenzar el viaje...


Era el ferry de las ocho y treinta. Y comenzaron a llegar algunas motos que iban para el encuentro de Sto Antonio de Jesús. Renato, con su Suzuki y su mujer, se acordaban de una fiesta que tuvimos en aquella casa de ensueño en Vilas del Atlántico y en la hora me invitó a comer unos mariscos en la isla. Y los vecinos y motociclistas Magno y Betty también se acordaban de como salvé el teléfono celular de ella, cuando la mergullaron, vestida, en la piscina...

Así que comenzó de cerveza, siguió de whisky, lambretas, langostinos y llegaron más camaradas estraderos y a esa altura mi único compromiso ya era llegar a Buenos Aires para el cumpleaños de mi vieja el 26 de setiembre!!


Caía la tarde cuando salimos para Sto Antonio. Kleber abría con su sietecincuenta efe. Detrás, Pablo con la Hayabusa. Yo cerraba. Kleber marcaba los buracos y dirigía los ultrapasages, a veces la lluvia me dolía en la cara.

Cuando la pista secaba, los cuatro cilindros roncaban... el paisaje nos envolvía con quebradas, riachos y curvas. Un rebaje, una toz violenta al limpiar el escape. La reprise.. y toda la potencia de los 157 caballos. Esa potencia áspera, como de cigarro o de cachaça o de carburador.

Tenía otros grupos en la ruta, pero los pasábamos sin darnos cuenta y ellos también, no nos seguían.

La cinta brillante, la hora mas sensible del día y ese ronco acompasado, especial, diferente. Cuatro en línea, descarga en dos y en uno, libre. La moto y la libertad.

Ahora llueve sin parar y na da para pensar en salir a la ruta a jugar al submarino. Estoy en una posada aconchegante. Kleber pagó mi diaria, sin consultarme ni conocerme! Otra fuerza para el viaje.

Zarpar de moto como zarpar de barco...

Ultima noite em Salvador.
Agosto de 2007.

La mañana que salíamos para Malvinas con el velero Malabar, amanecí con la rodilla derecha hinchada como una pelota de fútbol. No la podía flexionar, dolía para cacete y vendado me subieron abordo. Ni una vez pensé en suspender la partida.
Zarpamos y no recuerdo cuánto tiempo tardó en curarse, pero no fue mucho.

Algo así nos pasó un mediodía, que soltamos amarras en Hout Bay, Africa del Sur, con un borde largo para ganar barlovento y contra el acantilado, a la hora de virar, se cortó uno de los guardines de la rueda del timón y quedamos al garete!

Ese instante pareció un siglo, hasta que giramos el árbol de timón con una llave francesa. Encontramos y colocamos la caña de fortuna y me sumergí debajo del cópit para reparar.. terminamos esa misma noche, cuando el sentido común nos mandaba dar un borde afuera para dejar respeto a unas piedras...

domingo, 27 de enero de 2008

Mad Max rumbo a la Cúpula del Trueno

Salvador de Bahia, Brasil.
Primeros días de agosto de 2007.

La luz do sol de ese dia que como hoje e o ultimo dia, e diferente...

Estábamos en Rio, y uno de mis tripulantes, tres días después de salir de puerto, me dijo: le tenía miedo a este barco, todo oxidado y grosero.. pero ahora que conozco a Anita C, me doy cuenta de que es la máquina de navegar, es el barco de Mad Max

Ese título le di a la foto, porque en la hora que la magia y los misterios de esta bahía queden atrás, mi máquina de viajar va a ser de dos ruedas y yo me voy a volver a sentir Mad Max

No alcanza y no me canso de agradecer a todos los que me ayudaron en esta empresa. Llevo un poco de cada uno!
Me van a disculpar la falta de la versión en portunhol... queda para la próxima.

Los colores, la luminosidad de las cosas es especial. Como si brotase de adentro, como inundadas de nostalgia, de saudade, de melancolía por la pérdida anunciada, el viaje irremediable

Caminaba por la Laguna de los Patos, un suburbio después del aeropuerto que tal vez un día vuelva a llamarse 2 de Julio. Y el cielo parecía el de Puerto Argentino en las Islas Malvinas, tan lejanas y tan mías. Y las nubes, me llevaban a Hout Bay, con el viento del Atlántico que quería invadir el Indico. Y la arena en las calles, parecía la de esos últimos paseos con la Teneré , allá en Yoff, en Dakar, donde una Anita encalló en la playa y otra Christina espera por su papá.

No se me aparecen olores ni sabores de mi adiós a San Isidro, tal vez por eso de que nunca me fuí. De que siempre estoy volviendo, como el Gordo.

En una de mis últimas despedidas, de esas que ni el hígado ni la nariz o los pulmones aguantan más, había un chico porteño, que era apenas un bebé cuando la mamá murió en combate, en Monte Chingolo.
Y fue de Brecht, de puño en alto, de revolución...
Cuando le hablé de aquella carta de Fucik, escrita al pie del patíbulo, el me miró como si fuese un fantasma, y me dijo: "por la alegría e vivido, por la alegría e ido al combate, no quiero que nunca la tristeza sea unida a mi nombre ".
Esa mamá que el apenas conoció, esa mamá que aquel día en vez de cambiar pañales servía un mortero, le había dejado aquellas líneas como despedida.
Por eso hoy, que me inunda la pérdida, me acuerdo de cuantas veces imaginé a ese checoslovaco cantando la Internacional Comunista más alto y más fuerte quel estampido de las balas,

No tengo miles de millas de mar por delante, apenas cinco mil kilómetros de ruta.
Los miedos que salieron de sus jaulas, ya no vuelven.
La depresión es una pesadilla que mal recuerdo, tan mal, que hasta me permito sentirme triste y azul.
Pero a cada rato me sorprendo, pensando en que tengo una misión por cumplir.
Que este aventurero, motoquero y navegante, tiene un sueño inconcluso.
Un sueño que tiene que ver con la vida, con la alegría y con el futuro.
Un sueño que comienza con mi ruta Ho Chi Min.
Y después de sobrevir, con una taza de arroz, ¿vendrá la hora del AK 47?

La moto ya está no grau.
Las alforjas en la garupa y un neumático de reserva atado encima de todo.
Voy a cruzar en ferry, y después haré unos doscientos kilómetros por las islas, hasta llegar a la BR 101.
Botas, guantes y campera de cuero. Casco y antiparras. No llevo herramientas, no las voy a necesitar.
La próxima crónica, ya va a ser desde la ruta.
Un abrazo para todos y gracias por el corazón.

Salvador Buenos Aires, sem documentos

Salvador de Bahia, Brasil.
Primeros días de agosto de 2007.


Faz un año que todos los días digo que vo embora para Buenos Aires. Faz bastante tempo mais, que moraba numa casa con coqueiro dentro da sala, con jardín e una coleccion de acuarelas de Pipeta Banta en cada banheiro, piscina con vista ao mar e la maresia en cada cuarto e nada me preocupaba, porque esa primavera iba a ser eterna. Ya habia pasado un tempo en Itaparica, com outra casa mas pequenha, con parque con macacos leao e rosas e pier privativo. Mais, depois de tres meses de disfrutar de ese canto ideal para envelhecer e morrir eu me ligué de duas cosas: ainda nao era meu tempo de velhice o morte e, la adiccion a la adrenalina nao tem cura.

Eu vi gringos na Africa del Oeste e aqui, en esta Africa brasilera, acabados. Normalmente, e uma historia de amor, as veces hasta con filhos no medio y depois pegar el elevador ate el ultimo subsuelo e de la sigue para abaijo por escadas ou buracos, que sempre se encontram. El problema, es que no tem fondo.... sempre se pode descer mais!
Pasé das favelas a vivir de emprestado. E ate me pegué una hepatitis con canha 51. Trabalhé de mototaxi con la milcen en el ponto de Sao Cristobao, donde los mininos dicen que depois del gringo maluco, nada voltó a ser lo mesmo. Fique na entrada das festas vendendo cachaça de cores en sachet de plástico... Por falar de algunas das cosas que fize sem lembrar de cuando la milcen viró avión. Sobreviviría o terminaría pegando un pasajem a Europa em troca de nao preguntar que e que tem la mala? Aquele que me robó el pasaporte me ayudó, entre otras cosas, a afastarme de esa posibilidad.

Me lembro de um americano, Ron, que no Royal Cape Yacht Club da Africa do Sul todos los meses, daba una festa falando que iba embora e no iba nada.. Ate que una vez, na noite antes da festa, bebendo unos drinkes en el bar me ligué de que so el corpo de ele estaba conmigo, que sua alma ya habia partido para alto mar. E cuando al otro dia, alguém fizo la brincadera de que era so otra festa más, le dice nao. Esta e la ultima. Ele ya partio. E faz una semana que me sento asim. Eu tambén, ya partí.

Desde que sali de minha ultima casa con las alforjas e la incertidumbre, todo va de puta madre. Hoje, que dormi el dia todo, foi el primer dia que pude dormir... Tinha tantos amigos que no recordaba...
A Carioca le pido que me faza un abatimento en la mao de obra de los concertos que faltan y ele me dice: quero que cuando vc va embora, sepa que sou teu amigo! Y que va a dar una general na bicha.. que va a quedar milcien pontos para el viagem!! E que pase por la casa depois a beber unas geladas e fumar unos finos, y... y bom. Asim que faz una semana que paso las noites sem dormir, sonhando, acordado o con los olhos fechados, en la estrada, en la libertad, en el desafio.
Evaluo aquelo de que el vento e el mesmo.. mais esta vez, nao tenho velas.. vou precisar de una forza, de una grana.

E porque nao trabalha, vagabundo? Eu morro por trabalhar, producir. So que aqui eu nao poso. E una longa historia...
Si fose so gasolina, con mil reais daria certo... pra 5000 kilómetros máis o menos. La comida nao me preocupa, adelgazar me faz bem e a más, eu llamo minha travesía de travesía Ho Chi Min, porque si fose necesario voy facerla comendo arroz! E dormir.. importa menos, en las gasolineras sempre vou a encontrar un buraco para deitar ao lado da mil cem e esperar el dia, para seguir devorando millas.

Volté a sentir aquela sensaçao de Revellion 99, en el porto de San Isidro, abordo de meu veleiro Anita C con una garrafa de champagne, so nos dois. E todos los medos de atravesar el Atlántico e mudar de vida, por fora y por la frente...
E lembré de cuando Victor Ramos me mandaba cem dolares por mes a Cidade do Cabo... e que el dia que confese que los estoraba en una o dois noites, en drinkes y rock an roll me faló: para eso que eu te los mando, el dia que vc precise para comer, esta acabado!
E con los pneus novos, o semi, brinde de Bello de Asas del Litoral, me embré de esa vez no Iate Clube de Rio, que estabamos prontos a zarpar mas nao tinhamos reflector de radas nem baterias.. mais tuvimos un trocado para ir a bailar.. que era Carnaval. Y el vecino, de un catamaran de esos que llamar de luxo e poco, nos pidio ayuda para descargar las baterias velhas, y que ele estaba renovando todo el pack! E de troco, ficamos con tres de gel, de 120 que prestaron durante el cruce del Atlántico todo y mas media volta ao mondo. Vc se lembra Cone? Tem que lembrar como con latas velhas y tessoura e ribetes, depois de Tristan da Cunha, fizimos el reflector de radar.. Lo que nenguem alem de Cone e eu sabiamos, e que el Cone ya tinha HIV positivo.. mais de todos los tripulantes so ele era meu parcero.. e no tinha meleca de sangre, e cortes de chapas, que me fizese dar las costas a meu amigo.
E com el Carioca me sento como com elgentilhombre...

Desde embaixo, desde o fondo, parecia que este tempo nunca iba a llegar.. Nao podia nem imaginarlo. Agora, poso decir, que como con los medos, a los sonhos, tem que darles un nomen, una image e una gayola pra fecharlos... para que depois, cuando abre la porta y eles saen, nao volten nunca más.
Argentina, es solo depositar unos devaluados pesos en la caja de ahorro del Citibank nro 5 204855 015, de Juan Antonio Franklin López, sucursal San Isidro
Desde Brasil, conta popança Banco do Brasil, Agencia 2799-5 Conta 10886-3
From any place arround the world, with a Western Union transference is ok
Pensaba ahora en la paradoja de que mis cuentas de banco, sean las dos de ahorro, yo que nunca pude guardar un mango...

Faz unos des días que mande esta letra, que e el rasgunho de meu proximo romance.. Asim como escribí Com toda la mar detrás, no meu primer pasagem del Atlántico, agora va a ser este, e va a ser en portunhol.
So en Buenos Aires, habia recolhido tanto amor antes de salir de viagem.. Poso decir que este e meu segundo lar. En esto des días minha vision do mundo voltó a mudar.. Eu iba embora porque nao me aseguraba mais, e nao queria morir a toa. Como la primera vez, del primer pasagem. Como Melville, cuando dice que salia para alto mar antes de pegar cadeia o enfiar un canho na boca.. Sin embargo, agora, vou embora feliz. De tanto afecto, tanto amor, tanta amistade... Nao aguento mas despedidas, porque de ese jeito vo embora de cirrosis o de overdosis!! El taxista, Galego, me decia: gringo, que pena que vc llegó barón y va embora duro.. e eu le dice: cara, eu llegué con muito dineiro, e, nas magias e misterios de esta bahia, afogueté todo. Y voltaría a facer lo mesmo...